Sri Dharma Mittra es un maestro y gurú de yoga reconocido mundialmente.
Empezó sus estudios en la década de 1950 y es conocido como 'Maestro de Maestros' y la 'Roca del Yoga'. Su gráfico de 908 posturas como maestro de Yoga, hecho como una ofrenda de devoción a su Gurú, Swami Kailashananda, es un elemento básico en las paredes de las escuelas y ashrams de todo el mundo. Sri Dharma Mittra es también un maestro en la técnica de la meditación y el Desarrollo Psíquico. La paciencia y perseverancia de Sri Dharma lleva a sus estudiantes al camino de la maestría mental, la autorrealización y el poder de la conciencia colectiva en su escuela de Gramercy Park en Nueva York, donde enseña diariamente.
Frank151 envió preguntas de varios viajeros, estresados por el jet lag y los largos viajes en avión. Sri Dharma Mittra, que viaja por el mundo impartiendo la enseñanza del yoga y la meditación desde Tokio a Tel Aviv, dedicó parte de su tiempo para contestarlas y compartir algunos consejos para la meditación en los viajes.
Entrevista Stefan Schumacher
Fotos cortesía de Sri Dharma Mittra
Estimado Dharma, gran parte de mi tiempo estoy en un avión. Estoy atrapado durante horas y horas sin nada que hacer. ¿Cómo puedo sentirme en paz a pesar de que estoy hacinado en un pequeño asiento de clase turista?
Dharma Mittra: me encuentro en el mismo dilema con frecuencia. Pero vale la pena aprovechar esta maravillosa oportunidad de tener tiempo para estar con uno mismo. Puedes utilizar este valioso tiempo practicando la concentración. La concentración es la primera etapa necesaria para la práctica de la meditación. La concentración es aprender a mantener tus pensamientos en un objeto durante un mínimo de 30 segundos. Por supuesto, al principio, esto no será fácil debido a la naturaleza de la mente que es como un niño corriendo detrás de los sentidos externos. Puedo decir con seguridad que con la práctica regular se hace más fácil, tus pensamientos comienzan a disminuir su velocidad y pronto la mente se calma.
Estimado Dharma, los asientos en clase ejecutiva son muy incómodos y soy muy corpulento. ¿Qué me recomienda hacer para sentirme cómodo y poder utilizar mi tiempo para meditar? ¿Qué debo hacer con mis manos?
Dharma Mittra: Sí, por lo general es muy incómodo sentarse en los aviones y parece que están haciendo el espacio más pequeño en vez de más grande y más cómodo. En los vuelos largos y aparentemente interminables, esto realmente puede hacer mella en nuestros cuerpos. En primer lugar, yo recomendaría evitar las contracturas y la tensión en las cervicales con unos pocos giros suaves y lentos, hacer rodar la cabeza hacia la derecha y luego hacia la izquierda. Después hacer algunos pequeños círculos con los hombros, llevar los hombros hacia las orejas y luego hacerlos rodar hacia atrás y hacia abajo. Lo siguiente sería girar suavemente el pecho y el torso hacia la derecha y luego a la izquierda para aliviar la espalda y la columna vertebral. También relajar los pies haciendo algunos círculos con los tobillos con o sin calzado. Ahora, estás listo para poner tu cuerpo en una posición sentada, tan recto y alto como sea posible. Si lo necesitas, puedes poner una almohada detrás de tus lumbares y si no tienes una, puedes enrollar la chaqueta o el abrigo. Entonces debes asegurarte de que tus piernas están paralelas y si es necesario, puedes poner algo debajo de tus pies para conseguir plantarlos en el suelo. Puedes cruzar los tobillos. Luego, coloca los brazos en tu regazo con las manos entrelazadas ligeramente o puedes colocar tus manos sobre las rodillas y las palmas hacia arriba. Trata de mantener el cuello erguido y relajado con la cabeza muy bien equilibrada, con la barbilla un poco hacia abajo. Ya has colocado tu cuerpo hasta sentirte cómodo y lo que es mejor aún es que nadie necesita saber que estarás practicando la meditación. El método más sencillo es cerrar suavemente los ojos y poner tu atención en tu respiración. No cambies nada, sólo observa. Al instante, a medida que comienzas a observar tu respiración, la respiración se reducirá por sí sola. Ni siquiera tienes que hacer ningún esfuerzo. Mantén la observación en la respiración y se convertirá en lenta y constante y habrás hecho tu primer ejercicio en la práctica de la meditación. Ni siquiera necesito decirte cuales serán los efectos, se sienten de forma instantánea y tu cuerpo lo va a agradecer.
Estimado Dharma, usted llama la 'mente de mono' al echo de no poder mantener la concentración. Por lo general hay un bebé gritando en algún lugar del avión, o un hombre a mi lado roncando. ¿Qué debo hacer para evitar que mi mente se distraiga?
Dharma Mittra: La mente del mono se refiere a la mente descontrolada inquieta que nunca se detiene. Incluso nos sigue molestando mientras dormimos. Nuestros pensamientos siguen saltando de aquí para allá y nunca hay calma y paz. Estos pensamientos pueden cambiar su estado en un segundo. Y sin embargo, ¿qué son? Sólo son pensamientos que surgen en el horizonte de tu mente. Si los pensamientos no existen, entonces las preocupaciones desaparecen. Es el momento de probar los métodos de los grandes santos y sabios de diferentes religiones para poder aprender fácilmente las técnicas que calman esta llamada 'mente del mono'. Tu sabes que cuanto más se va al interior, más se puede eliminar todas las perturbaciones externas. He estado enseñando esto a mis estudiantes durante los últimos 40 años.
Estas prácticas son muy simples y en última instancia ¿qué mejor momento para iniciar la práctica de la meditación que cuando no tenemos otro lugar adonde ir? Cuando uno se halla así 'atrapado' en un lugar físico o mental, ya sea en un avión o en nuestras propias vidas y relaciones. Os estoy ofreciendo herramientas sencillas que se pueden utilizar en situaciones muy diferentes.
Una técnica práctica que ofrezco a todos los que buscan es cerrar los ojos y concentrarse en el centro del pecho en el lado derecho del corazón. Concéntrate en una luz allí. Incluso si no puedes ver la luz en un principio, sigue concentrándote allí y muy pronto aparecerá esa luz. Cuanto más concentrado, la luz se va a volver más y más resplandeciente como un sol brillante. Sí, la mente se distrae con los sentidos, los niños llorando y casi con cualquier cosa, pero mantén la concentración. Tú puedes recordar que no eres la mente (mono) y que todo es temporal y pasa de largo, pero tú eres el eterno presente. No te preocupes ... con el tiempo la mente comenzará a aquietarse y podrás sentirte solo y bien contigo mismo. Recuerda que incluso muchos de los grandes santos y sabios también sentían las fluctuaciones de la mente y los pensamientos y tuvieron que aprender a calmarlos.